Autores
Charo Rodriguez
Derechos y deberes
Por Charo Rodriguez. 62 años. Madrid. En camino. Una gotera que considero tenemos en nuestra cultura de hoy es la ausencia de la palabra deber en nuestro vocabulario. La palabra derecho se usa en cualquier circunstancia: en una queja, en…
Honestidad
Por Charo Rodriguez. 62 años. Madrid. En camino. Honestidad es la cualidad de anteponer la verdad en los pensamientos, expresiones y acciones. Primero en los pensamientos, cuidar que lo que pienso coincida con la verdad, con la realidad. Tanto con…
Responsabilidad
Por Charo Rodriguez. 62 años. Madrid. En camino. Para gestionar nuestro miedo, como cualquier emoción, en primer lugar necesitamos hacernos responsables de él. En vez de buscar culpables, mirarnos a nosotros mismos. Y mirarnos con objetividad, con verdad. Por ello…
Rescatándome
Por p.a.g. Burgos. ¿Donde estoy que ya no me reconozco? Alzó la vista del suelo, mis ojos se pierden en este trasfondo, ni claro ni oscuro; deambuló por estas aceras inmensas, rozando y esquivando pensamientos ajenos. ¡No quiero que atrapen…
Kathy Otto
Derechos y deberes
Por Charo Rodriguez. 62 años. Madrid. En camino. Una gotera que considero tenemos en nuestra cultura de hoy es la ausencia de la palabra deber en nuestro vocabulario. La palabra derecho se usa en cualquier circunstancia: en una queja, en…
Honestidad
Por Charo Rodriguez. 62 años. Madrid. En camino. Honestidad es la cualidad de anteponer la verdad en los pensamientos, expresiones y acciones. Primero en los pensamientos, cuidar que lo que pienso coincida con la verdad, con la realidad. Tanto con…
Responsabilidad
Por Charo Rodriguez. 62 años. Madrid. En camino. Para gestionar nuestro miedo, como cualquier emoción, en primer lugar necesitamos hacernos responsables de él. En vez de buscar culpables, mirarnos a nosotros mismos. Y mirarnos con objetividad, con verdad. Por ello…
Rescatándome
Por p.a.g. Burgos. ¿Donde estoy que ya no me reconozco? Alzó la vista del suelo, mis ojos se pierden en este trasfondo, ni claro ni oscuro; deambuló por estas aceras inmensas, rozando y esquivando pensamientos ajenos. ¡No quiero que atrapen…